29 enero 2010

Desfilando

Un mes de recorrer ensayos, de trasnochadas y llegadas tarde al laburo con ojos cansados, alimentandome mal y sin entrenar. Así empecé el año.

Igual corrí la San Fernando, igual caminé en la Salomon, igual largue desde atrás la San Antonio, y así terminé el mes más cansado que en plena temporada de competición.

Podría haber terminado Enero viajando a Colonia a una carrera de la que nunca participé. Pero la Real de San Carlos, pasa por una plaza de toros, y estoy completamente en contra de las competencias taurinas así como de las monarquías, por lo que no asistiré.

Enero llega a su fin en Montevideo con uno de los días más calurosos del año, pero, para envidia de algunos empleados públicos que no cuentan con aire acondicionado, lo pase encerrado en la oficina con el clima a 20º. Al salir me encotré 18 de Julio con poca gente, aún quedaba papel picado contra los cordones de la vereda y algunos obreros continuaban desarmando las tribunas que la noche anterior habían estado repletas de gente.

Unas horas antes, en plena noche, había caminado por ese mismo lugar, rodeado de colores y del sonido de tambores, baterías de murga, canciones y risas.

Mientras evitaba ser mojado por la espuma en spray disparé mi cámara casi un millar de veces, dejo aquí unas imágenes de lo que se vivió anoche en la avenida 18 de Julio.

La semana próxima nos esperan dos días más de desfile esta vez por el barrio Sur y Palermo a pura lonja y madera.





21 enero 2010

Click!


Jueves a la tarde, el calor se siente en la principal avenida, mientras algunos miran vidrieras otras regresan a su casa luego de una jornada de trabajo.
Trás un vidrio, entre ropa de todo tipo y color algo llama la atención, música electrónica, dos bandejas y un DJ le dan un toque distinto a la tardecita veraniega.

11 enero 2010

¿Evolución?

Hoy recibí mi nueva cámara de fotos, luego de varios días de ansiedad, llego a mis manos y la estoy descubriendo, leyendo el manual y mostrándosela a todos.


La puse en pose para la foto junto a mis viejas compañeras, cada una de de las cuales marcó una etapa en mi vida. Faltó en la foto la compañera de este año, que tanto me ayudó en las carreras de la AAU, pero ella ofrendó su cuerpo a los dioses, a cambio del logro de una nueva meta (léase: “pasó a cobre”).


Desde la vieja, tosca y rusa Zenit totalmente manual, de mis primeros pasos, cuando hacía mis primeros cursos de fotografía en la casona del Prado donde saqué mis primeras fotos a paisajes montevideanos y algunos tímidos acercamientos a los personajes de esta ciudad gris.



Pasando por la Canon EOS, ya con algunos automatismos y varios accesorios que me darían más seguridad y más gusto por esta otra pasión. Los estudios me llevarían al Taller Aquelarre y ya me empezaría a dar la cara para empezar a sacar primeros planos a desconocidos en la calle y a trabajar retratando quinceañeras y tortolitos enamorados. Ahí creo que me empezó a gustar la noche, y entre foto y foto empezaba a tomarle el sabor a distintos tipos de bebidas, y a conocer todo tipo de locales nocturnos.



Hace 13 años que saque mis primeras fotos, el tiempo pasa y uno cambia, en realidad no sé si evoluciona, pero si sé que hay que modernizarse.


Por si a algún fanático le interesa puede encontrar aquí datos interesantes de mi nueva compañera (en inglés), y aquí un lindo video (en gallego).